Como todos los viernes toca trabajar en el huerto, y en esta ocasión fueron los alumnos/as de 4 años B de la clase de Rosa y los de 5 años de las clases de Eva y Sagrario .
La tarea de 4 años comenzó con el riego de los bancales para después recordar qué plantas aromáticas hay en el huerto. Ya van reconociendo algunas (orégano, lavanda, melisa, tomillo, menta...), así que esta vez , pudieron recoger varias de ellas para llevar a casa, y descubrieron que tenemos un laurel en nuestro huerto.
Además es importante que aprendan la importancia de tenerlas en el huerto, no sólo lechugas, tomates....ya que plantar aromáticas ayuda a aumentar la biodiversidad propiciando la presencia de polinizadores y el aumento de insectos beneficiosos tan importantes para nuestros cultivos. Y aprendieron sus usos para la comida y las infusiones .
Como hace poco que habían ido a plantar cebolletas , fueron al bancal donde las colocaron a ver cómo estaban creciendo y a regarlas.
La clase de 5 años de Eva trabajó con los ajos y aprendió algunas cosas interesantes sobre ellos (En el Qr que colocaremos tendrán la información de esta planta de la Red de huertos escolares de Madrid)
"El ajo es uno de los cultivos principales de los huertos escolares . Una de sus principales ventajas es que no necesita prácticamente cuidados y que puede asociarse a casi cualquier cultivo, salvo con las leguminosas (habas, guisantes, judías..). Sembrando los ajos entre las zanahorias, contribuiremos a repeler a la mosca de la zanahoria; entre los tomates, contribuirá a prevenir el ataque de nemátodos a las raíces de la planta y cerca de las fresas, prevendrá también de la podredumbre gris, una enfermedad provocada por hongos.
Se suele sembrar en noviembre y diciembre, ya lo dice el refrán: «Días que pasan de enero, ajos que pierde el ajero» Y se cosecha a finales de junio
Nosotros cultivamos el bulbo o la cabeza. Esta cabeza está formada por varios dientes: dependiendo de la variedad y de la calidad del cultivo, cada cabeza puede contener de 6 a 12 dientes, y cada uno de ellos puede dar origen a una nueva planta de ajo, ya que poseen en su base una yema terminal que es capaz de germinar incluso sin necesidad de plantarse previamente."
Después de escuchar atentamente estas características de los ajos, recogieron los ajetes que estaban plantados en el contenedor, y descubrieron que si se siembran dientes de ajo, salen cabezas de ajo, pero si se siembran cabezas de ajo, el resultado son los ajetes.